Esta quizás es una de las preguntas que todo aerografista se ha preguntado alguna vez… El arte de la aerografía parece ser un concepto puramente contemporáneo pero la verdad es que sus orígenes son anteriores.
Mucho antes que los hermanos Walkup o Charles Burdick tuvieran en sus manos los primeros modelos de aerógrafos, lo cierto es que la historia de la aerografía comienza con el hombre de las cavernas y su afición por las pinturas rupestres.
¿increíble verdad? Pues sí gran parte de lo que sabemos de arte proviene de muchas técnicas y obras heredadas de nuestros antepasados que tuvieron que utilizar la imaginación para plasmar su arte en piedras, mármol, lienzos o edificios poniendo en riesgo en ocasiones hasta su propia seguridad.
Lo que sabemos en la prehistoria
Según diversas fuentes históricas nuestros ancestros y entre ellos especialmente “el homo habilis” ya utilizaban diferentes accesorios para realizar diferentes tareas. Uno de los descubrimientos que más quebraderos de cabeza trajo a los arqueólogos fueron unas extrañas manos impregnadas en negativo en las paredes de muchas cuevas.
Diversas localizaciones como las cuevas de Altamira, la cueva de Ardales o la cueva de Tito Bustillo albergan algunas obras de los hombres prehistóricos que representan patrones similares en los dibujos.
Tras muchas horas de investigación, muchos expertos dedujeron que muchas de estas obras se llevaban a cabo utilizando la técnica del estarcido, la cual consistía en utilizar plantillas de soporte (en este caso la forma de las propias manos del artista) para recubrirlas con pintura pulverizada violentamente.
A la hora de comenzar a pulverizar pinturas como el ocre rojo los artistas prehistóricos utilizaban un curioso artilugio similar a un tubo o una pajita que se soplaba para extender la pintura en las paredes. Aunque no era una herramienta tan efectiva como el aerógrafo moderno, su modo de uso era muy simple.
Analizando la imagen anterior puedes ver que este “supuesto artilugio” tiene muchas similitudes con un aerógrafo y su utilización.
Especialmente a la hora de expulsar pintura, sin embargo, este procedimiento no era del todo concluyente…
ya que la mayoría de los materiales eran huesos tallados que fácilmente se embozaban.
El efecto Venturi
Otro descubrimiento (aunque esta vez por accidente) que podemos atribuir también a los hombres de las cavernas (sin desmerecer a Bernoulli) es el efecto Venturi.
Según diversas fuentes el efecto Venturi es un fenómeno que ocurre cuando un líquido o un gas es movido a través de una sección estrecha (como por ejemplo una tubería) ocasionando una mayor velocidad de desplazamiento y una menor presión constante.
Este fenómeno fue atribuido a las investigaciones del italiano Giovanni Battista Venturi circa del siglo XVIII, gracias a él fue posible establecer las bases de funcionamiento para los motores de presión de muchos sectores como la industria hidráulica, la automoción o la aviación.
Tal y como puedes ver es la misma técnica que se utiliza en los aerógrafos modernos.